01 de agosto – Marc Mechenoua, Benjamin Quarez, Stéphane Bianchi, Adrien Chantegrelet y Alexandre Aflalo, del diario francés Le Parisien, han escrito un artículo de opinión en el que revelan el fichaje de Dembélé.
Las negociaciones, llevadas en el mayor secreto por Nasser, se acordaron también con el entorno de los jugadores para no divulgar ninguna información.
De hecho, la información difundida por RMC el viernes sorprendió incluso a los más próximos a Nasser. Tras conocerse esa noticia, la jerarquía del París Saint-Germain volvió a restar importancia al interés por el traspaso, limitándose a decir que se trataba de un contacto preliminar. Igual de increíble resultaba en el círculo de Dembélé el lunes por la mañana el hecho de que sus más allegados supieran lo feliz que se había puesto al conocer la noticia con la camiseta Barcelona 2023 en el vestuario.
Se hicieron públicos todos los detalles de esta transferencia:
Hace diez días, Nasser recibió una llamada telefónica de un agente muy conocido en sus círculos, transmitiéndole la idea de que el Barcelona estaba dispuesto a intercambiar a Rafinha, Gavi y Dembélé por Mbappé. Tras recibir esta llamada, Nasser habló directamente con el representante del jugador, advirtiéndole de las intenciones de los catalanes, al tiempo que tanteaba la voluntad del propio Dembélé de fichar por el PSG.Y este año, más que ningún otro, la puerta está abierta, aunque, en este preciso momento, éste no piense en desprenderse de la camiseta Barça 2023.
Después de que Nasser rechazara la oferta de intercambio por Mbappé, volvió a ponerse en contacto con el agente de Dembélé. Fue el agente de Dembélé quien informó a Nasser de los detalles de la cláusula de rescisión de 50 millones de euros y dejó claro que quería que su cliente fuera a París.
A mediados de la semana pasada, Nacer y el equipo de Dembélé mantuvieron una reunión en la que el presidente del PSG vendió el proyecto del París Saint-Germain e intentó conseguir el ansiado objetivo de la Liga de Campeones. Los comentarios hicieron dudar al delantero, que ya pensaba en el gesto ambivalente del Barcelona, y le inquietaron.
En la otra cara de la moneda, Xavi también dio mucha importancia a su contrato cuando decidió prorrogarlo el año pasado. El francés mantiene una relación fuerte, casi paternal, con su entrenador. Pero, visto lo visto, la jerarquía del Barça parece estar dividida. Después de prometer al extremo francés que sería el líder nominal del club, le han ofrecido incluirle en varias maniobras de traspaso en el verano de 2022, para regatear las conversaciones de ampliación de contrato en 2023. Esto no es una señal de confianza, ni de reconocimiento.
Por último, el hecho de que Deco, ex agente de Rafinha y estrella del Barcelona, se convirtiera en director deportivo del equipo no ayudó a la relación con Dembélé.
Ha firmado un contrato de cinco años con el París Saint-Germain por 20 millones de euros al año más primas. Sin embargo, todavía hay un factor importante: las negociaciones entre el París Saint-Germain y el Barcelona, que comenzaron el domingo entre los abogados de ambas partes.
A última hora del lunes, varias fuentes indicaron que el París Saint-Germain está discutiendo ahora con el Barcelona un precio de traspaso en lugar de pagar una cláusula de liberación, cuyo importe no se ha hecho público.